Viernes, y vaya con el mundo...

... y sigue el aferre de la Coalición por el Bien de López.

Ok, no diré nada...

Vuelve la histeria aeronáutica. Vaya, tres semanas antes y nos hubieran revisado con sonda en el aeropuerto. Trato de visualizar cómo es, ser una nación que está pensando todo el tiempo que todo mundo la odia y quiere eliminarla, y no se me da. (Bueno, tampoco puedo visualizar cómo será estar pensando que todo mundo está haciendo compló en... ok, no) Aunque la gente en las noticias parece maravillarse de que a la gente le quitan los zapatos y que revisan todas las maletas, y realmente los primos del norte hacen eso todo el tiempo (incluso a los arios, anglosajones y protestantes). Una vez me retuvieron y me llevaron a revisión aparte por un estúpido pin que me habían regalado como promoción de un videojuego que se llama Darkwatch, porque era una calavera con forma de estrella de sheriff, y en los rayos x aparecía como probable arma... pues me llevé un buen susto, de hecho, tiré la cosa a la primera oportunidad.

Y apenas este año ya se veían taxistas árabes otra vez...

En fin, realmente todo se reduce a lo de siempre, un idiota o conjunto de ellos que creen tener la razón, y que quieren imponerla a otro idiota o conjunto de ellos con similar misión. Todo sería tan fácil si simplemente se quedara cada uno en su lado de la cerca y se dejaran en paz... pero es demasiado pedir, ¿verdad? Recuerdo una frase de... quién sabe, tal vez Kruschev o Henry Kissinger, o Groucho Marx, quien sea. Decía algo así como que las súperpotencias en conflicto eran como dos ciegos encerrados juntos en una habitación, ambos pensaban que el otro estaba armado, y ambos pensaban que el otro podía ver.

No es coincidencia que en las novelas de Stephen King, el malo siempre sea el fanático religioso...

Faltan dos semanas para la Comictlán, y tenemos un espacio, tal vez ya deberíamos hacer algo al respecto.

Esta es de Nirva. Me gusta Nirva, creo que es la más divertida de todas las hermanas de Holy, o al menos la que da más material. Con tiempo ilimitado ya le habría dado su revista de consejos, su programa maussanesco y su línea de incienso. Algún día.

Sean felices, es viernes.

Eso es.