Conmemoraciones...

¿Catorce años de las explosiones del 22 de abril?

Vaya... y algunos de ustedes no habían nacido... pero tendrían que haber estado aquí en esos días, no es posible describir el ambiente que hubo. Fueron semanas de histeria, con todas las coladeras destapadas, y las noticias en la radio que cada vez aumentaban el área de riesgo, y sobre todo la confusión de qué había pasado, y por qué... caramba, tal confusión que Salinas salió como héroe por venir a supervisar... y eso que un servidor no lo vivió en directo. Vaya, un tío volvió a nacer, ya que la calle por la que pasaba todos los días voló un minuto después de su paso... y en el extranjero, por lo que me dicen, la noticia era que toda la ciudad había volado. Y eso parecía por las imágenes que pasaba la televisión.

Yo estaba por Plaza del Sol ese día, había ido a un trabajo de la escuela. Y como en guión de película gringa, pasaba por aparadores con televisión y las imágenes eran cada vez peores. Me imagino que el 9/11 debió sentirse muy parecido para los que estuvieron cerca pero no enmedio.

¿Saben qué fué lo más drástico? Nos llevaban de la prepa a clasificar las latas y demás cosas en los centros de acopio... y la mitad de todas las cosas estaban caducas. Y no por meses. Simpática, la humanidad.

Vaya...

Y en el otro extremo, el 23 de abril es el día del libro... y en algunos lugares el día de San Jordi (San Jorge, en cristiano)... me dice la Onlyguana que es costumbre en Barcelona que los mancebos regalen flores a las majas y ellas correspondan con un libro. O algo así.

Seguimos trabajando... sean felices, es sábado.

Eso es.