Me encanta mi trabajo...

...lo que debe ser una prueba irrefutable de que estoy genéticamente predispuesto al sadomasoquismo... Como reloj, nos llegó un bomberazo a las diez de la mañana (¡de sábado!) y acabamos de enviarlo terminado (a las dos de la mañana del domingo) para su montaje y presentación el lunes por la mañana... (claro que nos tomamos el tiempo para ser felices con la Onlyguana y ver una película horrorosa de la que hablaré mañana)... y todo parece indicar que vamos a seguir en labor las próximas horas.

Buen detalle, el estar en movimiento. El universo te envía justo lo que necesitas en el momento que lo necesitas, y yo necesitaba dejar de pensar en rotativas en llamas y redacciones explotando.

Podría ser mucho peor... en la Comicon de este año conocí un colega de Nueva Orleans, al que le escribí cuando empezaron las noticias del huracán, y apenas me contestó para certificar existencia... así que por un momento mis quejas por el asunto que todos conocen parecen ridículas.

Tanto qué hacer y tan poco tiempo... ¿será muy caro clonarse? En fin.

No he podido terminar de entintar el garabato a lápiz del otro día, espero tenerlo en un día o dos... mientras tanto, esta chamaca se veía fabulosa en boceto, y no sé qué pasó en la realización, me gustó tan poco que es de los que casi nadie ha visto este año. Así es este negocio.

Negocio... ÉSE es un chiste...

Eso es.