Tuesday, November 20, 2007

Una de tansguivin dey...

La máquina de movimiento perpetuo estaba haciendo lo que mejor sabía hacer, moverse perpetuamente... eso era muy útil sobre todo en las ocasiones en que había que darle la vuelta a los guantepavos.

El nombre había surgido de una mala broma en la antártida... la nueva especie de pavo genéticamente modificado tenía un extraño defecto por el cual sus órganos internos siempre estaban más fríos que el exterior. La única manera de que sobrevivieran a bajas temperaturas era voltearlos de manera análoga a un guante, para que el calor del plumaje se conservara en el interior.

Una granja de guantepavos volteados no era un espectáculo agradable de ver... pero eso no le preocupaba a la máquina de movimiento perpetuo. Ya había violado todas las leyes de la física (con las consiguientes demandas de paternidad) así que violar un par de leyes de la estética no suponía mayor problema.

Lo que requería una gran habilidad, era devolver los guantepavos a su estado original para su consumo... las glándulas cuánticas que le daban a las criaturas una inteligencia al menos análoga a la de un trilobite, también tenían el poco deseable efecto secundario de arrastrar lo que rodeaba al guantepavo a su interior cuando se restauraba. Lo que significaba una pugna de dimensiones cósmicas en la que cada guantepavo trataba de rellenarse con todo el universo conocido.

La máquina de movimiento perpetuo necesitaba de toda su habilidad para evitar que los guantepavos quedaran así rellenos. Para empezar, sería letal para el guantepavo, y para continuar, necesitaría una cantidad de salsa al menos equivalente a la masa del universo para prepararlo con el sazón debido.

La máquina de movimiento perpetuo no se atrevía a violar leyes laborales dejando los guantepavos a su suerte. Era el único tipo de leyes más poderosas que ella.

Nuevamente deseó que el ornitorrinco no estuviera de vacaciones. Su receta de guantepavo era clásica.

---

(Sí, estamos reseteando el cerebro, es evidente)

Eso es.

3 Comments:

Blogger aurangelica said...

Oh! Quisiera conocer a los trilobites y a los guantepavos.

Y sí me los imaginé...la máquina de movimiento perpetuo debió verselas negras tratando de controlar a tantos guantepavos al mismo tiempo.

Oh si... debió ser una ardua labor!

7:37 AM  
Blogger juanhelo said...

?¡¿eso si que hizo surrealista mi dia, hahahaha, HTGS!!!!!!!!!1

3:46 PM  
Anonymous Anonymous said...

Teóricamente, una máquina de movimiento perpetuo sólo debería de producir una h (6.626196 por 10 a la -27 ergios/seg) más de la que consume para moverse por siempre, aunque se moviera desesperantemente lenta...

Los Guantepavos me encantaron, recuérdame mandarte la última novela, creo que andamos con ondas en fase...

Un abrazo. Héctor Viveros, TEP

11:06 PM  

Post a Comment

<< Home