No me siento energetizado...
... pero bueno, se juntan una serie de factores, entre ellos enterarme de que el hotel más cercano que me han conseguido este año en San Diego está a veinte kilómetros del objetivo, que la repentina ventisca nos trajo como regalo una pestaña clavada entre el párpado y el lente de contacto que tres horas después sigue dando lata, que el trabajo del día estuvo somnífero y que por el partido de media semana no pasaron al Dr. House...
Tal vez debí treparme a alguna pirámide...
Los lentes de contacto duros tienen la mala costumbre de guardar basuras y de botarse a la menor provocación (bueno, no tanto así, pero no podría subir a la montaña rusa con ellos... lo que no hago, de todas formas)... por mi parte preferiría usar todo el tiempo los anteojos. En fin... soy demasiado cobarde para la operación (alguien cometió el error de contarme cómo era dicha ceremonia... y no, gracias) y demasiado atrabancado para acostumbrarme a los lentes blandos... y de todas formas, casi ni me gusta el masoquismo.
Ya quiero horario de verano...
Ok, la del día de Malcom: cada vez que repongo el agua de su molde bebedero, me encuentro con sedimentos raros hasta hoy inexplicados. Y resulta lo siguiente: cuando algo de lo que piensa engullir está demasiado seco, duro o poco masticable, lo sumerge en el agua y lo deja ahí mientras se echa unos tragos (¿sopa de carroña, tal vez?), y después lo extrae ya humedecido y lo lleva a su lugar de alimentación, donde ya lo puede engullir fácilmente.
Me parece que eso califica como manejo intuitivo de herramientas...
Eso es.
Tal vez debí treparme a alguna pirámide...
Los lentes de contacto duros tienen la mala costumbre de guardar basuras y de botarse a la menor provocación (bueno, no tanto así, pero no podría subir a la montaña rusa con ellos... lo que no hago, de todas formas)... por mi parte preferiría usar todo el tiempo los anteojos. En fin... soy demasiado cobarde para la operación (alguien cometió el error de contarme cómo era dicha ceremonia... y no, gracias) y demasiado atrabancado para acostumbrarme a los lentes blandos... y de todas formas, casi ni me gusta el masoquismo.
Ya quiero horario de verano...
Ok, la del día de Malcom: cada vez que repongo el agua de su molde bebedero, me encuentro con sedimentos raros hasta hoy inexplicados. Y resulta lo siguiente: cuando algo de lo que piensa engullir está demasiado seco, duro o poco masticable, lo sumerge en el agua y lo deja ahí mientras se echa unos tragos (¿sopa de carroña, tal vez?), y después lo extrae ya humedecido y lo lleva a su lugar de alimentación, donde ya lo puede engullir fácilmente.
Me parece que eso califica como manejo intuitivo de herramientas...
Eso es.
posted by Axel at 11:32 PM
2 Comments:
Ánimo cielo! Soñé toda la noche con reserva y busqueda de hoteles en San Diego...uff...pero ya no te preocupes, al parecer el de este año no está tan lejos como el del año pasado... al menos eso creo.
Ja, Dr. House?, mejor contrata cable, es mas seguro, si resultas Futbolifóbico como yo (circunstancias de hartazgo), así puedes ver ese programita que está agarrando fuerza y bastante, mientras a la distancia escuchas desgarrarse cuerdas vocales dando instrucciones de juego, saludos...
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