Después de la angina cerebral...
...mmm, ayer fue uno de ÉSOS días, en los que las facultades mentales se adormecen, sin alguna razón aparente... media página a lápiz, siendo que el promedio debería ser entre dos y tres... pero bueno, en esos casos no queda más que esperar a que el cerebro se resetee y poner otro episodio de Eureka.
Je, je, retornando del limbo, Minervita trajo un punto interesante, el de los comerciales de chicles que están a dos centímetros de ser minipelículas porno. No que me esté quejando, pero supongo que la goma de mascar en cuestión debe tener un efecto espectacular...
Esta semana voy a estar hablando de vez en cuando de Watchmen...
La leyenda empezó en 1986.
Bueno, realmente empezó unos años antes, en algún lugar de la mente privilegiada de Alan Moore. (A quien el mundo conoce por las adaptaciones que le han hecho de From Hell, The League of Extraordinary Gentlemen y Constantine... ninguna le hace justicia a su idea original... pero su aparición en los Simpson fue buena). Él fue de los primeros escritores ingleses en dar el salto a la industria del cómic estadounidense, y siempre se ha distinguido por llevar sus ideas más allá, mucho más allá. Se hizo un nombre con su reinvención de Swamp Thing (la Cosa del Pantano), que aún hoy se recuerda como uno de los mejores cómics de terror en la historia... tal vez el único que realmente asusta.
En fin, el caso es que en aquéllos días, DC Comics había comprado los derechos de los personajes de Charlton. The Question, Blue Beetle, y otros... bueno, un montón de personajes que casi nadie recordaba. Y Alan Moore tenía ideas rondando en su cabeza, poco más o menos: ¿Qué pasaría realmente si existieran los superhéroes? ¿Qué pasaría con el mundo, la política, la economía? ¿Qué clase de persona se pondría un disfraz y saldría a combatir el crimen? Bueno, su respuesta incluía varios problemas mentales, pero me estoy adelantando...
El caso es que presentó una propuesta para una serie diferente a todo lo que se había visto... personajes con un pasado oscuro, que en el transcurso de la historia morían o quedaban afectados irremediablemente, así como el mundo que los rodeaba... y vaya, le dijeron que esos personajes de Charlton no eran populares, pero tampoco era como para tratarlos tan mal... pero que esa historia podía funcionar con personajes nuevos.
Así empezó el asunto...
(Seguimos)
Eso es.
Je, je, retornando del limbo, Minervita trajo un punto interesante, el de los comerciales de chicles que están a dos centímetros de ser minipelículas porno. No que me esté quejando, pero supongo que la goma de mascar en cuestión debe tener un efecto espectacular...
Esta semana voy a estar hablando de vez en cuando de Watchmen...
La leyenda empezó en 1986.
Bueno, realmente empezó unos años antes, en algún lugar de la mente privilegiada de Alan Moore. (A quien el mundo conoce por las adaptaciones que le han hecho de From Hell, The League of Extraordinary Gentlemen y Constantine... ninguna le hace justicia a su idea original... pero su aparición en los Simpson fue buena). Él fue de los primeros escritores ingleses en dar el salto a la industria del cómic estadounidense, y siempre se ha distinguido por llevar sus ideas más allá, mucho más allá. Se hizo un nombre con su reinvención de Swamp Thing (la Cosa del Pantano), que aún hoy se recuerda como uno de los mejores cómics de terror en la historia... tal vez el único que realmente asusta.
En fin, el caso es que en aquéllos días, DC Comics había comprado los derechos de los personajes de Charlton. The Question, Blue Beetle, y otros... bueno, un montón de personajes que casi nadie recordaba. Y Alan Moore tenía ideas rondando en su cabeza, poco más o menos: ¿Qué pasaría realmente si existieran los superhéroes? ¿Qué pasaría con el mundo, la política, la economía? ¿Qué clase de persona se pondría un disfraz y saldría a combatir el crimen? Bueno, su respuesta incluía varios problemas mentales, pero me estoy adelantando...
El caso es que presentó una propuesta para una serie diferente a todo lo que se había visto... personajes con un pasado oscuro, que en el transcurso de la historia morían o quedaban afectados irremediablemente, así como el mundo que los rodeaba... y vaya, le dijeron que esos personajes de Charlton no eran populares, pero tampoco era como para tratarlos tan mal... pero que esa historia podía funcionar con personajes nuevos.
Así empezó el asunto...
(Seguimos)
Eso es.
posted by Axel at 12:44 PM
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