Bueno... no fué el mejor ni el peor de los años... hubo demasiadas quejas y demasiado odio esparcido en muy poco tiempo y espacio. No me gusta ese ambiente. Pero aquí seguimos, que es más de lo que muchos pueden decir. Muchos cambios, trabajo suficiente (pero esperamos echar a andar muchas más cosas), muchos viajes (al menos según mi estándar), y las cosas que se complicaron, aparentemente se resolvieron, o no eran tan graves como parecían.
En una nota aparte, esta es una de las últimas entradas en este blog. Voy a empezar uno nuevo, que no estoy seguro en qué va a diferir del actual, pero necesito el cambio. Principalmente porque aquí parece que estoy hablando solo. Así que veremos.
Sean felices, hay que hacer un mejor año.
Eso es.