Lunes y como dice la abuela...

...ni las gallinas ponen.

Bueno, Lolita está poniendo trabas para la devolución del saldo a favor, y las extrañas formaciones nubosas en el cielo comienzan a preocuparme. Ah, en fin, a nadar otra vez, ya lloviznó anoche.

Caramba, cuando necesito comedia por televisión, me da gusto poder contar con comerciales de fondo amarillo que proclaman: NOSOTROS expropiamos el petróleo, y otros de fondo rojo con el ama de casa que evidentemente no ejerce su doble doctorado universitario en economía y dice: sí, mija, contratar empresas privadas y privatizar el petróleo es lo mesmo.

En fin... editores deudores, así que parece que esta semana es para darle a los proyectos periféricos.

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CRÓNICAS DE LA AVENTURA EUROPEA:

Ésa es la Pedrera.

Es una de las casas de Gaudí en el paseo de Gracia, que más o menos es la calle más famosa de Barcelona (la calle principal es la Diagonal, llamada así porque... bueno... es la única diagonal)... como con todas las obras del mencionado, la gente la adora o la odia, y ésa en particular la odiaron mucho rato, de ahí el nombre. Había una exposición de un tal Zoran bastante espantosa, y para trepar cobraban nueve euros... para casi todo cobran nueve euros.

Las chimeneas de la Pedrera son uno de los temas favoritos para los fayuqueros de las ramblas (más de esto después), están por todas partes. Y en las profundidades de la casa hay, obviamente, tienda de souvenirs, donde hasta chones empedrados se encuentran.

Y ése día hacía más frío...


Eso es.